Este libro aborda el debate sobre los supuestos morales que subyacen a las regulaciones y prácticas, es decir, a las normas restrictivas sobre aborto en América Latina. En particular propone que la noción de biolegitimidad es un aspecto central de esta moralidad y que es en virtud del menor valor que se le reconoce o asigna a la vida de las mujeres, que tales restricciones se mantienen en todos los países de la región. Este menor valor se vincula, en el campo de la reproducción, con el rechazo a las mujeres que se niegan —cuando abortan— a la maternidad como un destino. Así, la persistencia de las normas restrictivas sobre aborto se fundamenta en la menor legitimidad que se otorga a la vida de las mujeres como biografía, limitando su libertad en materia de autodeterminación reproductiva. En este trabajo se cruzan el feminismo, la salud pública, el derecho y la bioética, el campo en el cual se ordena la conversación aquí propuesta. En suma, el libro ofrece una reflexión sobre los valores y principios que informan las normas —entendidas tanto en su sentido formal en cuanto disposiciones del derecho positivo, como en su sentido informal en tanto prácticas sociales— sobre aborto en América Latina.